jueves, diciembre 08, 2005

CUANDO HAY -13ºC YA NO ES TAN IDEAL

A pesar de la sensación térmica tan baja, hoy a la noche me sacaron a correr. Sí, a correr; yo MRF, salí a mover las cachas. Vamos a ver si continúo en esta actividad porque, la verdad, es que mal no me viene. Si bien hago un poco de ejercicio, hay días en los que no salgo del hogar (por eso no actualizo el blog). Sin embargo, no sé cuán saludable será para mí que el aire fresquito de acá entre en mi organismo. Yo creo que mañana termino internada en algún centro de salud de Toronto, aunque me han prohibido enfermarme hasta enero, ya que María (y no estoy hablando en tercera persona) empieza a trabajar en un lugar nuevo y no va a poder faltar.
Además de conocer todo tipo de supermercado, el Coto y el Makro canadienses -No frills y Costco respectivamente- finalmente conocí un IKEA, lugar que les escuché nombrar a todos aquellos que tuvieron que armar sus casas en el exterior, incluida la casa de quienes me acogen.
Poco y nada utilicé el inglés hasta el momento, salvo ayer que estuve en una librería y mientras Lautaro jugaba, yo conversaba con un padre que había llevado a su hijo.
¿Qué más? Como y bebo, pero trato de no darle muy duro, porque sino voy a volver como cuando regresé de New Orleans: Miss Piggy.
Esperen hasta el fin de semana para tener algo más interesante que esto. Mientras, yo estoy muy bien a pesar del fresquete que se empieza a sentir.